Corpúsculo paciniano

La termocepción o termorrecepción es el sentido por el que un organismo percibe las temperaturas. Aún se están investigando los detalles del funcionamiento de los termorreceptores. Los mamíferos tienen al menos dos tipos de sensores: los que detectan el calor (es decir, temperaturas superiores a la temperatura corporal) y los que detectan el frío (es decir, temperaturas inferiores a la temperatura corporal). Un termorreceptor es un receptor sensorial o, más exactamente, la porción receptiva de una neurona sensorial que codifica los cambios absolutos y relativos de temperatura, principalmente dentro del rango inocuo. El estímulo adecuado para un receptor caliente es el calentamiento, que provoca un aumento de su tasa de descarga del potencial de acción; el enfriamiento provoca una disminución de la tasa de descarga del receptor caliente. Para los receptores fríos, su tasa de disparo aumenta durante el enfriamiento y disminuye durante el calentamiento. Los tipos de receptores capaces de detectar cambios de temperatura pueden variar.

Algunos de los receptores que muestran la capacidad de detectar cambios de temperatura son los bulbos terminales de Krause y las terminaciones de Ruffini. Los bulbos terminales de Krause se definen como cuerpos cilíndricos u ovalados formados por una cápsula que se forma por la expansión de la vaina de tejido conjuntivo y que contiene un núcleo eje-cilindro. Los bulbos terminales se encuentran en la conjuntiva del ojo, en la membrana mucosa de los labios y la lengua y en el epineuro de los troncos nerviosos. También se encuentran en el pene y el clítoris; de ahí el nombre de corpúsculos genitales. En estas localizaciones, tienen un aspecto similar al de las moras, ya que están constreñidos por septos de tejido conjuntivo en dos a seis masas en forma de perilla.

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Músculos con fibra roja

¿Qué son los receptores Krause?

Los corpúsculos de Krause de la conjuntiva y el limbo corneal son bien conocidos por morfólogos y fisiólogos como receptores sensoriales de la sensación de frío. 1,2. Están formados por fibras nerviosas meduladas relativamente gruesas que se originan en el plexo nervioso paramarginal anular de Attias.

¿Qué tipo de receptor son los bulbos Krause?

Los corpúsculos bulboides (bulbos terminales de Krause) son receptores cutáneos del cuerpo humano.

¿Qué detectan los corpúsculos de Krause?

Los corpúsculos pacinianos detectan la presión transitoria y las vibraciones de alta frecuencia. Los bulbos terminales de Krause detectan el frío.

Corpúsculo de Ruffini

Son diminutos cuerpos cilíndricos u ovales, constituidos por una cápsula formada por la expansión de la vaina de tejido conjuntivo de una fibra medulada, y que contienen un núcleo blando semifluido en el que el eje-cilindro termina en un extremo bulboso o en una masa plexiforme enrollada.

Los bulbos terminales se encuentran en la conjuntiva del ojo (donde tienen forma esferoidal en los seres humanos, pero cilíndrica en la mayoría de los demás animales), en la membrana mucosa de los labios y la lengua, y en el epineuro de los troncos nerviosos.

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También se encuentran en el pene y el clítoris y han recibido el nombre de corpúsculos genitales;[4] en estas situaciones tienen un aspecto similar al de las moras, ya que están constreñidos por septos de tejido conjuntivo en dos a seis masas en forma de perilla[cita requerida].

Localización de los corpúsculos de Krause

La somatosensación es una categoría sensorial mixta e incluye todas las sensaciones recibidas de la piel y las mucosas, así como de las extremidades y las articulaciones. La somatosensación también se conoce como sentido táctil o, más familiarmente, como sentido del tacto. La somatosensación se produce en todo el exterior del cuerpo y también en algunos lugares del interior. En ella intervienen diversos tipos de receptores situados en la piel, las mucosas, los músculos, las articulaciones, los órganos internos y el sistema cardiovascular.

Recordemos que la epidermis es la capa más externa de la piel de los mamíferos. Es relativamente fina, está compuesta por células llenas de queratina y no tiene riego sanguíneo. La epidermis sirve de barrera al agua y a la invasión de patógenos. Por debajo, la dermis, mucho más gruesa, contiene vasos sanguíneos, glándulas sudoríparas, folículos pilosos, vasos linfáticos y glándulas sebáceas secretoras de lípidos (Figura 17.4). Por debajo de la epidermis y la dermis se encuentra el tejido subcutáneo o hipodermis, la capa grasa que contiene vasos sanguíneos, tejido conjuntivo y los axones de las neuronas sensoriales. La hipodermis, que contiene aproximadamente el 50 por ciento de la grasa corporal, une la dermis al hueso y al músculo, y suministra nervios y vasos sanguíneos a la dermis.

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Heminegligencia

Bombilla Krause

Son cuerpos diminutos, cilíndricos u ovales, constituidos por una cápsula formada por la expansión de la vaina de tejido conjuntivo de una fibra medulada y que contiene un núcleo blando semifluido en el que el eje-cilindro termina en una extremidad bulbosa o en una masa plexiforme enrollada.

Los bulbos terminales se encuentran en la conjuntiva del ojo (donde tienen forma esferoidal en los seres humanos, pero cilíndrica en la mayoría de los demás animales), en la membrana mucosa de los labios y la lengua, y en el epineuro de los troncos nerviosos.

También se encuentran en el pene y el clítoris y han recibido el nombre de corpúsculos genitales;[4] en estas situaciones tienen un aspecto similar al de las moras, ya que están constreñidos por septos de tejido conjuntivo en dos a seis masas en forma de perilla[cita requerida].