Síndrome glúteo profundo
El síndrome piriforme es una afección dolorosa que se desarrolla debido a la irritación o compresión del nervio ciático cerca del músculo piriforme. El músculo piriforme conecta las vértebras inferiores con la parte superior de la pierna tras recorrer la “escotadura ciática”, la abertura del hueso pélvico que permite al nervio ciático viajar hasta la pierna. Aquí, el músculo y el nervio son adyacentes y esta proximidad es la razón por la que pueden surgir problemas.
Esta afección es relativamente frecuente. Se calcula que alrededor del 5% de los casos de ciática (irritación del nervio ciático que causa dolor irradiado desde la espalda o la nalga hacia la pierna, la pantorrilla y el pie) se deben al síndrome piriforme. Parece ser más frecuente entre las mujeres, aunque se desconoce el motivo.
El paciente típico con síndrome piriforme se queja de “ciática”, es decir, dolor agudo, intenso e irradiado desde la parte baja de la espalda o la nalga hasta la parte posterior de la pierna y hacia el muslo, la pantorrilla y el pie. Los síntomas pueden parecer debidos a una bursitis de cadera o a una hernia discal (“hernia discal”), pero el examen médico ayuda a averiguar la verdadera causa, porque con el síndrome piriforme la persona también tiene:
Ejercicios para el síndrome piriforme
La ciática es un dolor musculoesquelético que se siente en la pierna a lo largo de la distribución del nervio ciático, a veces acompañado de dolor lumbar. Aunque hay muchas causas de ciática, el síndrome piriforme es una causa a menudo mal diagnosticada de ciática. El nervio ciático discurre por debajo y por delante del músculo piramidal de la pelvis y desciende por la parte posterior del muslo y la pierna. El síndrome piriforme está causado por la compresión o irritación del nervio ciático debido al espasmo del músculo piriforme. La presentación más común es dolor en la región glútea posterior que baja por la pierna en la zona del nervio ciático. No existe ninguna prueba diagnóstica definitiva ni criterios diagnósticos universales para el síndrome piriforme. El tratamiento de primera línea consiste en antiinflamatorios no esteroideos (AINE). La cirugía suele realizarse como último recurso una vez que se han agotado todas las demás opciones de tratamiento y se han excluido otras etiologías. El síndrome del piramidal de la pelvis es un diagnóstico de exclusión y, a menudo, una causa infravalorada de ciática.
Tratamiento del síndrome piriforme
Regeneración de nervios periféricos: de la cirugía a los nuevos enfoques terapéuticos, incluidos los biomateriales y las terapias celulares Desarrollo Capítulo revisado por pares de acceso abierto Atrapamiento de nervios periféricos y su tratamiento quirúrgico Escrito por Vicente Vanaclocha-Vanaclocha, Nieves Sáiz-Sapena, Jose María
Ortiz-Criado y Nieves Vanaclocha Revisado: 17 de febrero de 2017 Publicado: 31 de mayo de 2017 DOI: 10.5772/67946 DESCARGAR GRATIS Compartir Citar Citar este capítulo Hay dos formas de citar este capítulo: 1. Elija el estilo de citación Seleccione el estilo
4. ConclusiónLos síndromes de atrapamiento nervioso son más frecuentes de lo que actualmente se piensa. Su conocimiento es esencial para diagnosticar y tratar a tiempo al paciente. Aunque casi cualquier nervio puede sufrir un síndrome de atrapamiento, algunos son más frecuentes que otros. El más frecuente es el STC, seguido de la meralgia parestésica y el atrapamiento del nervio cubital en el codo. La presentación clínica es dolor, parestesia y pérdida de fuerza muscular en la distribución del nervio afectado. Muchos casos son idiopáticos, pero otros son inducidos por mecanismos de compresión internos o externos. Algunas afecciones sistémicas se asocian a una mayor incidencia de estos síndromes. La presentación clínica junto con los estudios electrodiagnósticos ayudan al diagnóstico. La ecografía y la resonancia magnética también son útiles pero no se utilizan con tanta regularidad.En muchos casos, el tratamiento médico conservador es suficiente. En muchos casos el tratamiento médico conservador es suficiente, pero cuando no lo es hay que recurrir a la descompresión quirúrgica, que puede ser abierta o endoscópica. En cada caso, habrá que ver cuál muestra mejores resultados. Algunos casos con dolor persistente tras la descompresión quirúrgica podrían beneficiarse de la neuroestimulación del nervio periférico.
Estiramiento de los piriformis
Toda la investigación del mundo sobre los síntomas del síndrome piriforme y la búsqueda del mejor estiramiento de los músculos piriforme para aliviar el dolor de glúteos no parece estar ayudando, pero en lugar de buscar en foros donde otros hablan de sus experiencias individuales para el dolor en los músculos de sus glúteos, ¿qué tal si nos dejas ayudarte mirando a la ciencia detrás de esto, para que puedas entender lo que está pasando, empezar a usar los ejercicios piriforme correctos para ponerte en camino a la recuperación.
En cada cadera, se extiende desde la parte posterior de la pelvis hasta la parte superior del fémur. Debido a su posición única, el músculo piriforme ayuda a rotar la pierna hacia fuera cuando la cadera está extendida, pero rota la pierna hacia dentro y en abducción cuando la cadera está flexionada.
Al correr, el piriforme está más activo durante la fase de “apoyo”, en la que el pie está plantado en el suelo. Aquí actúa como rotador externo de la pierna, pero no es ni el músculo principal ni el más potente que desempeña esa función.
El piriforme está situado justo al lado del nervio ciático, un nervio muy grueso que va desde la base de la columna vertebral a lo largo de los músculos de los glúteos y por la parte posterior de las piernas, proporcionando las señales nerviosas que permiten que todos los músculos de la parte posterior de la parte inferior del cuerpo se activen cuando es necesario.