Examen interno de fisioterapia del suelo pélvico
La fisioterapia del suelo pélvico consiste en métodos físicos de fortalecimiento y/o relajación de los músculos del suelo pélvico para ayudar a mejorar la estabilidad central y el control de la micción, la defecación y la función sexual.
El tono muscular del suelo pélvico puede cambiar debido al parto, el proceso de envejecimiento o el estrés. Esto puede provocar que los músculos se estiren demasiado y se aflojen, se debiliten o se tensen demasiado y se restrinjan. Tanto la disminución como el aumento del tono muscular pueden provocar disfunciones del suelo pélvico.
La investigación apoya la terapia del suelo pélvico como una opción de tratamiento mínimamente invasivo que debe utilizarse como método de primera línea para tratar diversos tipos de disfunción del suelo pélvico, incluidos problemas como el prolapso de órganos pélvicos, la incontinencia urinaria o fecal y las relaciones sexuales dolorosas.
Una vez que el fisioterapeuta haya completado las exploraciones y realizado una evaluación clínica sobre las posibles causas de sus síntomas, se le programarán sesiones de seguimiento. Cada sesión tendrá lugar en una sala de tratamiento privada.
¿Qué se hace en fisioterapia del suelo pélvico?
El objetivo de la fisioterapia del suelo pélvico es mejorar la función del suelo pélvico mediante ejercicios, modificaciones del estilo de vida, educación y tratamiento práctico para reducir y eliminar los síntomas. Esta terapia consiste en evaluar y tratar un grupo de músculos que intervienen en la función urinaria, intestinal y sexual.
¿Por qué necesitas terapia del suelo pélvico?
Si padece disfunción urinaria, relaciones sexuales dolorosas o dolor en la zona pélvica, la fisioterapia del suelo pélvico puede ser la clave para aliviarle. De hecho, puede utilizarse para tratar muchos trastornos, molestias o dolores relacionados con el suelo pélvico.
¿Cuándo se debe acudir a un fisioterapeuta especializado en suelo pélvico?
Si experimentas síntomas como disfunción urinaria, estreñimiento y dolor pélvico, puede que sea el momento de acudir a un fisioterapeuta especializado en el suelo pélvico. Darianne Butler ve a los pacientes en el Campus Este de Regional One Health. Ella dijo que los pacientes deben esperar para describir sus preocupaciones y someterse a un examen.
¿Necesito terapia de suelo pélvico?
La fisioterapia del suelo pélvico es un área de la fisioterapia de postgrado que puede utilizarse para ayudar a controlar y tratar diversas afecciones, como la incontinencia, el dolor pélvico, el prolapso de órganos pélvicos o el dolor relacionado con el embarazo.
Los músculos del suelo pélvico ayudan a sostener los órganos pélvicos y desempeñan un papel importante en la función sexual, así como en el mantenimiento de la continencia intestinal y vesical y la eliminación. La debilidad o el aumento de la tensión en los músculos del suelo pélvico pueden causar o contribuir a muchos síntomas, como dolor, estreñimiento, prolapso, pérdidas de orina o aumento de la necesidad o frecuencia de ir al baño.
La fisioterapia del suelo pélvico puede utilizarse para ayudar a controlar los síntomas mediante la relajación o el fortalecimiento del suelo pélvico, la educación y la terapia práctica. El fisioterapeuta del suelo pélvico evaluará los músculos del suelo pélvico externa y/o internamente para ayudar a determinar los ejercicios y el tratamiento adecuados para crear un programa individualizado basado en pruebas para ayudar con los síntomas.
Terapia interna del suelo pélvico en casa
Physio for All es una de las primeras clínicas de Londres que se ha especializado en la rehabilitación del suelo pélvico. Podemos responder a sus preguntas con discreción y ponerle en el buen camino hacia un suelo pélvico que funcione correctamente.
Los fisioterapeutas especializados en salud pélvica están especialmente formados para evaluar y tratar una amplia gama de problemas del suelo pélvico en mujeres, hombres y niños, como la incontinencia, el prolapso de órganos, las relaciones sexuales dolorosas, la enuresis y el dolor pélvico.
La rehabilitación o reeducación del suelo pélvico no consiste únicamente en realizar ejercicios. Tras una evaluación exhaustiva, se elabora un plan de tratamiento para tratar el problema actual y las causas subyacentes. Las modalidades de tratamiento varían en función de tus necesidades y pueden incluir ejercicios de relajación y fortalecimiento del suelo pélvico, terapia manual, biorretroalimentación, electroterapia, educación y asesoramiento.
Los músculos del suelo pélvico se debilitan, se tensan o duelen por muchas razones. No todo se debe al envejecimiento. Los problemas del suelo pélvico suelen comenzar con el embarazo y el parto, y también son frecuentes en jóvenes deportistas. Hombres, mujeres y niños de todas las edades necesitan un suelo pélvico sano. La fisioterapia para la salud pélvica o la salud de la mujer ha demostrado su eficacia en el tratamiento y la prevención de muchas afecciones.
Especialista en suelo pélvico
La fisioterapia del suelo pélvico es un enfoque de tratamiento que utiliza los principios de la fisioterapia para proporcionar un reacondicionamiento estructurado, eficaz y seguro de los músculos del suelo pélvico. El objetivo del tratamiento es mejorar la fuerza y la función de los músculos del suelo pélvico y aliviar el dolor, la debilidad y la disfunción de los músculos. Durante el tratamiento, un fisioterapeuta cualificado accede a los músculos a través del recto o la vagina y los manipula para mejorar su fuerza y funcionamiento. El fisioterapeuta puede estirar los músculos si están cortos y contraídos o aplicar resistencia para mejorar su fuerza si están débiles y disfuncionales.
La terapia del suelo pélvico se dirige a los músculos, ligamentos y tejidos conjuntivos del suelo pélvico, todos los cuales trabajan juntos para sostener los órganos pélvicos, contribuir a la excitación sexual y al orgasmo, y ayudar al control de la vejiga y los intestinos. Estos tejidos están unidos a la pelvis, el coxis y el sacro y se coordinan para sostener el tracto urinario y reproductor, incluidos el útero, la próstata, la vejiga, el recto, la uretra y la vagina. Proporcionan estabilidad pélvica y favorecen el correcto funcionamiento de los órganos pélvicos, como la función sexual y miccional, junto con la postura y la respiración. Cuando los músculos pélvicos no funcionan como deberían, aparecen dolores y síntomas que interfieren en el funcionamiento normal.