Musculoskeletal deutsch
Los trastornos musculoesqueléticos (TME) son una de las dolencias más comunes relacionadas con el trabajo. En toda Europa afectan a millones de trabajadores y cuestan a las empresas miles de millones de euros. Combatir los TME contribuye a mejorar la vida de los trabajadores, pero también tiene sentido desde el punto de vista empresarial.
Los TME relacionados con el trabajo afectan a la espalda, el cuello, los hombros y las extremidades superiores, así como a las inferiores. Abarcan cualquier daño o trastorno de las articulaciones u otros tejidos. Los problemas de salud van desde pequeñas molestias y dolores hasta afecciones más graves que requieren baja laboral o tratamiento médico. En los casos más crónicos, pueden incluso provocar incapacidad y la necesidad de abandonar el trabajo.
La mayoría de los TME de origen laboral se desarrollan con el tiempo. No suele haber una única causa de TME; a menudo se combinan diversos factores de riesgo, como factores físicos y biomecánicos, factores organizativos y psicosociales y factores individuales.
En general, todos los factores psicosociales y organizativos (especialmente cuando se combinan con riesgos físicos) que pueden provocar estrés, fatiga, ansiedad u otras reacciones, que a su vez aumentan el riesgo de TME.
Trastornos musculoesqueléticos
Los trastornos musculoesqueléticos son muy difíciles de definir dentro de las clasificaciones tradicionales de enfermedades. Estos trastornos han recibido muchos nombres, como: La mayoría de los nombres no describen con exactitud los trastornos. Por ejemplo, el término “lesiones por esfuerzo repetitivo” sugiere que la repetición causa estos trastornos, pero las posturas forzadas también contribuyen. Estos términos se utilizan como sinónimos. A falta de acuerdo, en este documento se utiliza el término WMSD.
Los TME surgen de movimientos del brazo y la mano como doblar, estirar, agarrar, sujetar, girar, apretar y alcanzar. Estos movimientos habituales no son especialmente nocivos en las actividades ordinarias de la vida diaria. Lo que los hace peligrosos en situaciones laborales es la repetición continua, a menudo de forma enérgica, y sobre todo, la velocidad de los movimientos y la falta de tiempo para la recuperación entre ellos. Los TME están asociados a patrones de trabajo que incluyen: Por lo general, ninguno de estos factores actúa por separado para causar un TME. Los TME suelen producirse como resultado de una combinación e interacción entre ellos. El calor, el frío y las vibraciones también contribuyen al desarrollo de los TME. Para obtener más información sobre los factores de riesgo de los TME, visite nuestro documento de OSH Answers Trastornos musculoesqueléticos de origen laboral (TME) – Factores de riesgo.
Aparato locomotor deutsch
Fig. 1Flujograma de los participantes en el estudio (n = 969)Imagen a tamaño completoCaracterísticas de los sujetos y variables demográficasUn poco más de la mitad de los pacientes incluidos (517/969) refirieron DMEC. Los pacientes con DMEC eran significativamente mayores, tenían un nivel educativo inferior y trabajaban más a tiempo parcial que los pacientes sin DMEC (Tabla 1). Aproximadamente uno de cada tres pacientes con DMEC declaró que su estado de salud era “no muy bueno”, en comparación con el 8% de los pacientes sin DMEC. El 13% de los pacientes declararon estar de baja por enfermedad debido al DMEC, y casi la mitad (46,3%) habían estado de baja durante más de tres meses (Tabla 1).
Tabla 2 Factores demográficos y asociaciones con una menor calidad de vida relacionada con la salud (puntuación total de CVRS 15D < 0,9) entre los pacientes con dolor musculoesquelético crónico: resultados de los análisis de regresión logística (n = 517)Tabla de tamaño completo
Características del dolor entre los pacientes con DMEC y sus asociaciones con la CVRSLa mayoría de los pacientes con DMEC refirieron tres o más focos de dolor, y el foco de dolor más frecuente fue la zona lumbar. La mayoría de los pacientes calificaron la intensidad de su dolor actual de “baja” a “moderada”, y entre las actividades de la vida diaria, el sueño y la actividad diaria general fueron las más afectadas por el dolor. En los análisis de regresión logística univariable, casi todas las variables relacionadas con el dolor se asociaron significativamente con una menor CVRS (puntuación total inferior a 0,9). Los factores que siguieron estando significativamente asociados con una menor CVRS en los análisis multivariables fueron las funciones de la vida diaria afectadas por el dolor, como el estado de ánimo, las relaciones con otras personas, el sueño y el disfrute (Tabla 3).
Dolor musculoesquelético deutsch
Además de la edad, hay otros factores que pueden aumentar el riesgo de sufrir lesiones ortopédicas dolorosas. Entre ellos se incluyen los antecedentes familiares, la profesión, el estilo de vida y determinadas actividades, como levantar pesos pesados, realizar movimientos repetitivos o adoptar posturas inadecuadas.
La artritis es una enfermedad en la que el cartílago (el tejido gomoso que protege los extremos de los huesos) se desgasta gradualmente. El resultado puede ser dolor articular en las manos, el cuello, la zona lumbar, las rodillas o las caderas.
En la artritis reumatoide, el sistema inmunitario ataca a sus propias células. Si no se trata, la AR puede erosionar los huesos y causar deformidades en las articulaciones, como los dedos. La AR afecta primero al cartílago articular, pero la inflamación puede extenderse a otros órganos de todo el cuerpo.
Los traumatismos, el uso excesivo y las enfermedades pueden debilitar los huesos, a veces hasta el punto de provocar una fractura total o parcial. Una fractura ósea no sólo es dolorosa, sino que también puede provocar una pérdida temporal de funcionalidad en un brazo, una pierna, un pie o una mano.