¿Es bueno caminar para una hernia discal?

Una hernia discal (núcleo pulposo herniado) es una enfermedad de la columna vertebral en la que parte del núcleo del disco intervertebral sale de las capas externas del disco (anulus fibrosus) y presiona los nervios o la médula espinal, lo que puede causar dolor.

Obtenga más información sobre las hernias discales en este artículo: ¿Qué es exactamente una hernia discal y cuáles son sus síntomas? ¿Cuáles son las causas de una hernia discal? ¿Cuáles son los posibles tratamientos y terapias? Y mucho más…

Los discos intervertebrales son articulaciones fibrocartilaginosas situadas entre las vértebras. Una hernia discal (código CIE-10: M50-M51) es la salida de una parte del núcleo gelatinoso (núcleo pulposo) del disco intervertebral a través de las capas externas del disco (anulus fibrosus). El material prolapsado presiona los nervios (nervio espinal) o el

Con un buen equilibrio de líquidos, los discos vertebrales ocupan el 25% de la longitud de la columna vertebral. Si los discos vertebrales se vuelven quebradizos a una edad avanzada, la columna vertebral en general se acorta, lo que reduce la movilidad.La probabilidad de sufrir una hernia discal es de aproximadamente el 3,5% para las personas menores de 35 años. Aumenta al 20% entre los 45 y 55 años. Los hombres se ven afectados dos veces más que las mujeres. El 90% de las hernias discales se producen en la columna lumbar. Las restantes

¿Qué puede hacer un fisioterapeuta en caso de hernia discal?

La fisioterapia puede incluir masajes profundos, terapias de frío/calor, hidroterapia y ejercicio. La fisioterapia suele desempeñar un papel fundamental en la recuperación de una hernia discal. Sus métodos no sólo ofrecen un alivio inmediato del dolor, sino que también le enseñan a acondicionar el cuerpo para evitar nuevas lesiones.

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¿Puede mejorar una protrusión discal?

Las hernias discales mejoran por sí solas con el tiempo o con tratamiento no quirúrgico en 9 de cada 10 personas. Si otros tratamientos no alivian los síntomas, el médico puede recomendar una intervención quirúrgica.

¿Cuánto tarda en curarse una protrusión discal?

La mayoría de las personas se recuperan de una hernia discal en seis semanas sin tratamiento.

¿Puede un fisioterapeuta diagnosticar una hernia discal?

Su espalda puede sufrir una lesión en el disco intervertebral que puede tener numerosos términos que describen lesiones discales de leves a graves. Esperemos que este artículo le explique las diferencias entre las distintas descripciones utilizadas para las variaciones de las lesiones discales.

Una lesión de disco abultado es una lesión común de la columna vertebral sufrida en el disco intervertebral de la columna vertebral. Puede producirse en la columna lumbar (parte inferior de la espalda), la columna torácica (parte superior y media de la espalda) o la columna cervical (cuello).

Una hernia discal suele ser una hernia discal o una protrusión discal. Sin embargo, cuando la protrusión discal es lo suficientemente importante como para que el núcleo del disco se salga del anillo, se habla de hernia discal. Véase el diagrama.

Los discos intervertebrales son anillos de fibrocartílago y glicoproteína que absorben los golpes y separan los cuerpos vertebrales óseos, al tiempo que permiten el movimiento en cada nivel de la columna vertebral y dejan espacio suficiente para que los principales nervios espinales salgan del conducto raquídeo y se dirijan a las extremidades.

La sección externa del disco intervertebral es el anillo. Está formado por capas de fibras fibrocartilaginosas multidireccionales. Todas ellas están densamente empaquetadas para crear una pared alrededor del núcleo de disco gelatinoso relleno de glicoproteína.

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Éxito de la fisioterapia para la hernia discal

Una hernia discal suele denominarse disco deslizado, pero no se preocupe, ya que su disco no puede “deslizarse” en ninguna parte. Piense en los discos como amortiguadores entre las vértebras de la columna. Lo que ocurre en realidad es que el grueso núcleo gelatinoso del centro del disco sobresale a través de un pequeño defecto en la pared fibrosa del disco. Esta pequeña protuberancia del núcleo puede irritar y comprimir la raíz nerviosa causando dolor, que puede irradiarse a la pierna. Existen distintos tipos y grados de prolapso discal, que pueden verse en el diagrama siguiente.

Por lo general, un prolapso discal se producirá si ya existe una debilidad en la pared fibrosa del disco, que a menudo sólo requiere que se ejerza una pequeña presión sobre la columna vertebral para que se produzca un prolapso. Por ejemplo:

Tanto los médicos como los fisioterapeutas pueden evaluar y diagnosticar un prolapso discal. Durante una consulta, un fisioterapeuta puede comprender sus síntomas, su historia laboral y social, su historial médico y, a continuación, realizar una evaluación física. Dependiendo de sus síntomas, puede ser necesario realizar una resonancia magnética o una consulta con un especialista quirúrgico. Si esto es necesario, su fisioterapeuta lo discutirá a fondo con usted.

Qué ejercicios evitar con los discos abultados

Los discos intervertebrales actúan como “amortiguadores” de la espalda. También permiten el movimiento de la columna vertebral y proporcionan el espacio por donde los nervios espinales salen de la columna vertebral (hacia otras zonas del cuerpo).

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Una hernia discal es una afección muy común en la columna vertebral (sobre todo a medida que envejecemos), así que no se alarme. Esta lesión se presenta cuando el anillo (ver imagen) se daña o debilita, con lo que el núcleo pulposo se desplaza más allá de su posición normal dentro del disco (pero no existe ni sobresale del disco).

QUÉ CAUSA UN ABULTAMIENTO DE DISCOUn traumatismo repetitivo: una mala postura de la columna vertebral o levantar objetos pesados de forma repetitiva con una técnica inadecuada pueden provocar la degeneración o el debilitamiento del disco y, por tanto, causar un abultamiento. Estas afecciones suelen clasificarse como más crónicas y están estrechamente relacionadas con la falta de estabilidad de los músculos centrales de la columna vertebral, la falta de flexibilidad y movilidad de la columna vertebral o la obesidad.

Traumatismos o lesiones agudos: pueden causar una protuberancia si se produce un aumento repentino de la presión sobre el disco, que normalmente puede provocar desgarros en el anillo. Un traumatismo agudo, o una fuerza/carga repentina sobre el disco, puede ser un accidente de coche, levantar cajas pesadas del suelo o una mala técnica al levantar pesos pesados en el gimnasio.