Tiempo de consolidación de una fractura de tuberosidad mayor mínimamente desplazada
Técnica quirúrgicaSe obtuvieron radiografías preoperatorias en 2 planos (anteroposterior [AP] y vista en Y) y una tomografía computarizada (TC). Todos los pacientes fueron operados en posición de silla de playa bajo anestesia general o regional. La cirugía fue realizada por un único cirujano (LL). En todos los casos se realizó un abordaje deltopectoral utilizando un sistema de implante consistente (Univers Revers; Arthrex, Naples, EE.UU.). El vástago humeral se cementó en 19 casos (50%) y se colocó a presión en 19 casos (50%) en función de la calidad ósea. En esta cohorte se seleccionó en todos los casos un ángulo de inclinación humeral de 135°. La tenotomía de la cabeza larga del bíceps se realizó de forma rutinaria. Tras la identificación de las tuberosidades y la resección de la cabeza humeral, se colocó una placa base en la glenoides. En todos los casos se seleccionó una glenosfera estándar sin lateralización ni inferiorización. El tamaño de la glenosfera se eligió en función de la anatomía del paciente: 36 mm en 10 casos, 39 mm en 26 casos y 42 mm en 2 casos. Tras la fijación del vástago humeral, las tuberosidades se suturaron horizontalmente alrededor del vástago de la prótesis con un cerclaje de sutura doble (Fibertape, Arthrex). En todos los casos se aplicó una sutura vertical adicional entre el vástago humeral y la prótesis en forma de ocho. La técnica de cerclaje se ilustra en la Fig. 1.
¿Cuánto tiempo hay que llevar un cabestrillo tras una fractura de tuberosidad mayor?
Tras la intervención, es imprescindible llevar un cabestrillo durante 6 semanas. El objetivo del cabestrillo es permitir la cicatrización tanto del hueso como del desgarro del manguito rotador. Durante este tiempo se puede mover el dedo, la muñeca y el codo, pero no el hombro. A continuación, puede iniciarse la fisioterapia de forma activa.
¿Cómo se trata una fractura de la tuberosidad mayor del húmero?
Fracturas de la tuberosidad mayor Tratamiento
Si los huesos siguen en su posición normal, puede ser necesario colocar un cabestrillo en el brazo. Otros tratamientos pueden incluir reposo, hielo y medicación antiinflamatoria. Una vez curado el hombro, también puede recomendarse fisioterapia.
¿Es dolorosa una fractura de la tuberosidad mayor?
Las fracturas de la tuberosidad mayor pueden asociarse a desgarros de espesor parcial del manguito de los rotadores y desgarros labrales, que pueden ser la causa de dolor persistente tras la consolidación de la fractura.
Fractura de la tuberosidad mayor y rotura del manguito de los rotadores
Las fracturas de la tuberosidad mayor son un tipo único de fracturas proximales del húmero. Aunque algunas personas se refieren a ellas como fracturas de hombro, nosotros preferimos evitar ese término, ya que hay muchos huesos alrededor del hombro. Las fracturas de la tuberosidad mayor pueden producirse debido a un traumatismo o a una luxación del hombro, y representan una interrupción ósea de los tendones del manguito rotador alrededor del hombro. Pueden producirse en cualquier grupo de edad, aunque lo más frecuente es que se deban a una caída en personas mayores o a lesiones deportivas. Cuando la pieza ósea se desprende, los músculos/tendones del manguito rotador unidos tienden a tirar de la pieza hacia atrás y hacia el centro del cuerpo.
Los pacientes suelen ser atendidos primero en Urgencias, donde se realiza el diagnóstico. Se aplica un cabestrillo para ayudar a controlar el dolor y evitar movimientos alrededor del hombro. A diferencia de muchas otras fracturas, no es posible “escayolar” las fracturas alrededor del hombro, ni es necesario en este caso para permitir la curación.
Los pacientes son remitidos a una clínica de fracturas, donde son examinados por un cirujano ortopédico. Las radiografías obtenidas y la causa de la lesión ayudarán al cirujano a determinar la gravedad de la lesión. Como las decisiones sobre el tratamiento dependen del tamaño de la fractura y de cuánto se haya desviado de su localización normal (o “anatómica”), a menudo se realiza un TAC.
Tratamiento de la fractura desplazada de la tuberosidad mayor
La fractura está en una buena posición y sólo tiene una pequeña posibilidad de desplazarse. Acudirá a un especialista en hombro 3 semanas después de la lesión. Le harán otra radiografía y evaluarán su hombro para orientarle en la siguiente fase de la rehabilitación.
Compresas frías: Una compresa fría (bolsa de hielo o guisantes congelados envueltos en una toalla húmeda) puede aliviar el dolor a corto plazo. Aplíquela en la zona dolorida durante un máximo de 15 minutos, cada pocas horas, asegurándose de que el hielo nunca esté en contacto directo con la piel.
Reposo: Intente descansar el hombro durante las primeras 24-72 horas. Sin embargo, es importante mantener el movimiento. Mueva suavemente el hombro siguiendo los ejercicios indicados. Estos no deben causar demasiado dolor. Esto evitará que el hombro se ponga rígido y ayudará al proceso de curación.
La evidencia médica sugiere que fumar prolonga el tiempo de curación de la fractura. En casos extremos, puede detener la curación por completo. Es importante que tenga en cuenta esta información en relación con su reciente lesión. Dejar de fumar durante la fase de curación de su fractura le ayudará a garantizar una recuperación óptima de esta lesión.
Cómo dormir con fractura de tuberosidad mayor
El húmero -también conocido como el hueso de la parte superior del brazo- es un hueso largo que va desde el hombro y la escápula (omóplato) hasta el codo. Las fracturas del húmero se clasifican en dos categorías: fractura proximal del húmero o fractura de la diáfisis humeral.
La fractura proximal del húmero suele producirse cerca de la articulación del hombro y puede localizarse a distintos niveles con diferentes patrones de fractura: simple o conminuta. En cambio, la fractura de la diáfisis del húmero se localiza en la parte media del brazo.
La mayoría de las fracturas del húmero proximal pueden tratarse sin cirugía si los fragmentos óseos no están desplazados. Si los fragmentos están desplazados, a menudo se realiza una intervención quirúrgica para permitir una movilidad más temprana. Sin embargo, también se tienen en cuenta otros factores a la hora de decidir entre la fijación quirúrgica o el tratamiento no quirúrgico.
El tratamiento no quirúrgico suele consistir en un cabestrillo o un inmovilizador de hombro sin movilidad del hombro durante las dos primeras semanas. A partir de entonces, el paciente recibirá ejercicios semanales para aumentar lentamente la amplitud de movimiento del hombro. Se tomará una radiografía del hombro semanal o quincenalmente (cada dos semanas) para confirmar que la fractura está cicatrizando correctamente.















