Ejercicios de hombro Sinex
Los nervios y los músculos trabajan juntos para producir el movimiento. Los nervios envían señales entre los músculos y el cerebro sobre dónde, cuándo y a qué velocidad moverse. Con el tiempo, los patrones de movimiento muscular se aprenden y se almacenan en la memoria.
Cuando los nervios o los músculos sufren daños o lesiones como consecuencia de traumatismos y diversas afecciones médicas y neurológicas, los patrones de movimiento muscular pueden verse afectados negativamente. La reeducación neuromuscular es un método utilizado por los fisioterapeutas para facilitar el retorno del movimiento normal en pacientes con alteraciones neuromusculares. Nuestras innovadoras estrategias de atención en Western Slope Rehab and Performance le ayudarán a encontrar un alivio rápido.
Para eliminar muchos de los síntomas que presenta un paciente durante su tratamiento, es fundamental restablecer el sentido cinestésico normal y la propiocepción de la columna cervical, torácica, lumbar y del esqueleto apendicular. Cuando estas características neurológicas no funcionan correctamente, el paciente no puede mantener una postura adecuada y muchos de los músculos de la zona afectada no funcionan correctamente. El dolor, la inflamación y la hinchazón debidos a una intervención quirúrgica o a una lesión pueden provocar la pérdida del control neuromuscular y movimientos anormales.
¿Qué ocurre como resultado de la alteración del control neuromuscular del hombro?
El control dinámico de los músculos rotadores desempeña un papel importante en la estabilización del hombro durante el movimiento. El deterioro del control neuromuscular de estos músculos puede provocar lesiones y dolor. Los programas de rehabilitación tienen un éxito moderado en la disminución del dolor y la mejora de la función del hombro.
¿Qué significa control neuromuscular?
El control neuromuscular se define como la respuesta entrenada inconsciente de un músculo a una señal relativa a la estabilidad dinámica de la articulación. Los movimientos de la extremidad inferior, incluida la articulación de la rodilla, se controlan a través de este sistema, que necesita proporcionar la mensajería correcta para un movimiento intencionado.
¿Cuáles son las causas del desequilibrio muscular del hombro?
Los desequilibrios musculares del hombro pueden deberse a regímenes de entrenamiento desequilibrados, al entrenamiento para un deporte concreto, a tareas relacionadas con el trabajo y a una mala postura. También pueden producirse desequilibrios secundarios a otras lesiones de hombro.
Ejercicios neuromusculares para la inestabilidad del hombro
Este estudio se realizó de acuerdo con la Declaración de Helsinki. Todos los individuos fueron informados sobre el estudio y firmaron un consentimiento informado antes del estudio. Y este estudio fue aprobado por el comité de ética de Beijing Tongren Hospital Capital Medical University y registrado en ChiCTR.org.cn (ChiCTR2100054453).
Información adicionalNota del editorSpringer Nature se mantiene neutral con respecto a las reclamaciones jurisdiccionales en los mapas publicados y las afiliaciones institucionales.Información suplementariaArchivo adicional 1. Detalles de la intervención.Derechos y permisos
Reimpresiones y permisosSobre este artículoCite este artículoWang, L., Yu, G., Zhang, R. et al. Efectos positivos de los ejercicios neuromusculares sobre el dolor y la amplitud de movimiento activo en el hombro congelado idiopático: un ensayo controlado aleatorizado.
BMC Musculoskelet Disord 24, 50 (2023). https://doi.org/10.1186/s12891-023-06173-8Download citationCompartir este artículoCualquier persona con la que compartas el siguiente enlace podrá leer este contenido:Get shareable linkLo sentimos, actualmente no hay disponible un enlace compartible para este artículo.Copy to clipboard
Hombro inestable
El objetivo de este estudio es determinar y comparar los efectos de los ejercicios de control neuromuscular para el hombro, y los programas de ejercicios conservadores estándar, que son diferentes formas de ejercicio y tienen un papel importante en el tratamiento de las roturas del manguito de los rotadores de espesor parcial en el tratamiento. Por lo tanto, se pretende comparar estos tipos de ejercicios con diferentes mecanismos en el tratamiento, para determinar el lugar de los ejercicios de control neuromuscular en el tratamiento y si son más eficaces que los ejercicios convencionales.
Los ejercicios para el control neuromuscular del hombro se progresarán comenzando con el peso corporal y, en las fases siguientes, se aplicará un programa que progrese hacia ejercicios que mejoren la estabilización dinámica, la coordinación y la propiocepción del hombro para entrenar el sistema sensoriomotor. El programa de ejercicios se realizará dos veces por semana durante 8 semanas (16 sesiones).
En este grupo, que se beneficiará principalmente de los ejercicios convencionales de fortalecimiento de la cadena cinética abierta, se aplicará un programa de ejercicios de fortalecimiento avanzando del peso corporal a las bandas elásticas y las pesas. El programa de ejercicios se realizará dos veces por semana durante 8 semanas (16 sesiones).
Rehabilitación de la inestabilidad de hombro
El dolor de hombro es una complicación frecuente tras un ictus, que afecta a un tercio de los pacientes con ictus en general. No sólo repercute negativamente en el nivel de independencia y la capacidad funcional del paciente, sino que también impide una rehabilitación satisfactoria (Roy et al., 1994).
Por lo que sabemos, actualmente no existen pruebas sobre cómo las deficiencias motoras residuales en pacientes con ictus, que han desarrollado la capacidad de realizar movimientos aislados y selectivos del brazo, podrían crear desequilibrios en la coordinación de los músculos escapulotorácicos y escapulohumerales durante las tareas de las extremidades superiores (De Baets et al., 2013). Dicha información podría ser de interés a la hora de estudiar el impacto de las articulaciones escapulotorácicas y glenohumerales como factores que contribuyen a las (dis)funciones de las extremidades superiores (es decir, disminución de la amplitud de movimiento) y al dolor tras un ictus. Además, faltan pruebas sobre la influencia de la carga externa y la altura de anteflexión en los patrones de activación de los músculos escapulares tras un ictus. Ya se detectó una activación más temprana y una desactivación más tardía del trapecio inferior y el serrato anterior en condiciones de carga durante la elevación y el descenso del brazo, respectivamente, en personas sanas y personas con pinzamiento (Phadke y Ludewig, 2013).