Tipos de fracturas del pie
Las fracturas de los dedos y el antepié son bastante frecuentes. Las fracturas pueden deberse a un golpe directo en el pie, como dar una patada accidental a algo duro o dejar caer un objeto pesado sobre los dedos. También pueden deberse al uso excesivo y al esfuerzo repetitivo que conlleva la práctica de deportes de alto impacto, como el atletismo, el fútbol o el baloncesto.
Las fracturas de los dedos del pie y del antepié suelen deberse a traumatismos o lesiones directas en el hueso. Las fracturas también pueden desarrollarse tras una actividad repetitiva, en lugar de una única lesión. Esto se denomina “fractura por estrés”.
Cuando acuda a su médico, le hará un historial para averiguar cómo se lesionó el pie y le preguntará por sus síntomas. A continuación, le examinará el pie y podrá compararlo con el pie del lado opuesto.
(Izquierda) En esta radiografía apenas se aprecia una fractura reciente por estrés en el tercer metatarsiano (flecha). (Derecha) Varias semanas después, se ha formado un callo en el lugar y la fractura puede verse con mayor claridad.
La fractura de un dedo del pie puede ser consecuencia de una lesión directa, como la caída de un objeto pesado sobre la parte delantera del pie, o de una patada accidental o un golpe contra un objeto duro. También puede producirse una fractura si se golpea accidentalmente el lateral del pie con un mueble en el suelo, y los dedos se tuercen o tiran hacia los lados o en una dirección incómoda.
¿Cuál es el hueso del pie que más se fractura?
Los huesos metatarsianos son algunos de los huesos del pie que se rompen (fracturan) con más frecuencia. Hay cinco huesos metatarsianos en cada pie. Son los huesos largos y delgados que recorren la longitud del pie hasta la base de los dedos.
¿Qué fracturas óseas del pie son frecuentes?
En adultos y niños mayores de cinco años, las fracturas del quinto metatarsiano son las más frecuentes, seguidas de las fracturas del tercer metatarsiano. También se tratarán las fracturas de los dedos de los pies, las más frecuentes de todas las fracturas del pie.
¿Qué hueso del tarso se fractura con más frecuencia?
El calcáneo es el hueso del tarso que se fractura con más frecuencia, y representa el 60% de todas las fracturas del tarso en adultos [1].
Tipos de fracturas de pie y síntomas
Una fractura por estrés es una pequeña fisura en un hueso o un hematoma grave dentro de un hueso. La mayoría de las fracturas por sobrecarga están causadas por el uso excesivo y la actividad repetitiva; son frecuentes en corredores y atletas que practican deportes de carrera intensiva, como el fútbol y el baloncesto.
A veces, las fracturas por estrés se producen cuando las personas cambian de actividad, como cuando prueban un nuevo ejercicio, aumentan repentinamente la intensidad de sus entrenamientos o cambian de superficie de entrenamiento (correr en una cinta frente a correr al aire libre). Además, si la osteoporosis u otra enfermedad ha debilitado los huesos, el simple hecho de realizar actividades cotidianas puede provocar una fractura por sobrecarga.
Los huesos del pie y la pantorrilla que soportan el peso son especialmente vulnerables a las fracturas por sobrecarga debido a las fuerzas repetitivas que deben absorber durante actividades como caminar, correr y saltar.
Abstenerse temporalmente de realizar actividades de alto impacto es clave para recuperarse de una fractura por estrés en el pie o el tobillo. Retomar la actividad demasiado rápido no sólo puede retrasar el proceso de curación, sino también aumentar el riesgo de una fractura completa. Si se produce una fractura completa, se tardará mucho más tiempo en recuperarse y retomar las actividades.
Tiempo de recuperación de una fractura de pie
Millones de personas sufren fracturas, o huesos rotos, cada año en Estados Unidos. La gente se rompe los huesos de diferentes maneras: Las fracturas óseas son consecuencia de accidentes de tráfico, lesiones deportivas, caídas y uso repetitivo, como correr. Algunas personas sufren fracturas óseas como consecuencia de enfermedades, como la osteoporosis, que hace que los huesos se debiliten debido a la degeneración.
Sea cual sea la causa, debe acudir a un profesional médico inmediatamente después de fracturarse un hueso. Si se rompe un hueso del dedo del pie, del pie o del tobillo, es posible que necesite consultar a un podólogo experto en esas zonas. El Dr. John A. Scheffel de Scheffel Foot Center puede recomendarle el mejor plan de tratamiento para las fracturas de la parte inferior de la pierna y el pie.
Las fracturas pueden ser cerradas (sin piel rota), abiertas (piel rota), desplazadas (hay un hueco entre los dos extremos del hueso), parciales o completas. Afortunadamente, la curación de los huesos es un proceso natural que sólo requiere la intervención de un profesional, que se asegurará de que los huesos se curan de la forma más rápida y eficaz posible.
Tratamiento de fracturas de pie
Los médicos de atención primaria suelen ser los primeros médicos a los que acuden los pacientes por lesiones en los pies, y las fracturas se encuentran entre las lesiones del pie más frecuentes que evalúan.1 En este artículo se destacan algunas fracturas del pie frecuentes que pueden tratar los médicos de atención primaria.
Las fracturas de pie varían mucho en cuanto a gravedad, pronóstico y tratamiento. Las tasas de curación también varían considerablemente en función de la edad del paciente y las comorbilidades. Por ello, en este artículo se ofrecen intervalos de curación generales para cada fractura.
Recomendación clínicaCalificación de la evidenciaReferenciasEl uso de la ecografía musculoesquelética puede considerarse para diagnosticar fracturas metatarsianas sutiles.C9, 10 Las fracturas no desplazadas o mínimamente desplazadas (menos de 3 mm) de los vástagos de los metatarsianos segundo a quinto con menos de 10° de angulación pueden tratarse de forma conservadora con una bota para caminar con la pierna corta, un zapato enyesado o un vendaje elástico, con carga de peso progresiva según se tolere. C2-4, 6 Las Reglas de Ottawa para el tobillo y el pie deben utilizarse para ayudar a determinar si la radiografía es necesaria cuando se evalúa a pacientes con sospecha de fractura del quinto metatarsiano proximal. A14, 16 El tratamiento quirúrgico precoz de una fractura de Jones permite una reincorporación más temprana a la actividad que el tratamiento no quirúrgico, y debe tenerse muy en cuenta en el caso de los atletas u otras personas muy activas.B2, 6, 13, 20-22 Las fracturas no desplazadas o mínimamente desplazadas (menos de 2 mm) de los dedos menores de los pies con una afectación articular inferior al 25% y sin angulación ni rotación pueden tratarse de forma conservadora con vendaje adhesivo o un zapato de suela rígida.C6, 24, 25