Tratamiento de la dismenorrea primaria
Este estudio fue aprobado por el Comité Ético de Investigación de la Facultad de Fisioterapia de la Universidad de El Cairo (nº P.T. REC/ 012/001428). Entre agosto de 2015 y marzo de 2016, el estudio reclutó aleatoriamente a mujeres que estudiaban en la Facultad de Fisioterapia. Se aplicaron los siguientes criterios de inclusión: edad, 18-25 años; solteras; sin antecedentes de trastornos sanguíneos, incluida la talasemia y la anemia por deficiencia de folato o hierro; ausencia de enfermedades crónicas que puedan afectar a la salud general. Para calcular el tamaño de la muestra en este estudio se utilizó el cálculo probabilístico del tamaño de la muestra para la prevalencia, n = t2 × p (1 – p)/m2, con n=tamaño de la muestra requerido, t=nivel de confianza al 95% (valor estándar de 1. 96), p=prevalencia estimada de dismenorrea en el área de estudio (70%), m=margen de error al 5% (valor estándar de 0,05), y n = (1,96)2 × 0,7(1 – 0,7)/(0,05)2. Por lo tanto, el tamaño de muestra requerido era n = ∼323 participantes.
De las 323 mujeres que recibieron el cuestionario, 54 fueron excluidas del estudio porque no lo devolvieron (30 mujeres), padecían enfermedades crónicas como diabetes de tipo 1, artritis reumatoide o asma (16 mujeres) o se habían sometido a una apendicectomía (8 mujeres). La muestra final incluyó a 269 mujeres que cumplían los criterios de inclusión y devolvieron el cuestionario con respuestas completas. Todas las mujeres dieron su consentimiento informado por escrito para participar en el estudio. En este estudio se utilizó el cuestionario desarrollado por Potal et al8 , con algunas modificaciones (añadiendo o eliminando preguntas) para tener en cuenta las características específicas de la muestra del estudio. El cuestionario autoinformado modificado fue sometido por un experto a pruebas de validez facial y de contenido, así como de consistencia interna, obteniéndose un valor alfa de Cronbach de 0,71, que se considera indicativo de una fiabilidad media a alta. La encuesta incluía preguntas destinadas a proporcionar una visión general de la experiencia de las mujeres con dismenorrea. Se recogieron los siguientes datos: edad en la menarquia; presencia y duración de la dismenorrea; cantidad de sangrado; regularidad de la menstruación; fuente de conocimiento sobre la menstruación; síntomas asociados; gravedad de la dismenorrea en diferentes partes del cuerpo, puntuada en la escala analógica visual (EAV) de 0 a 10; y métodos utilizados para aliviar el dolor.
¿Qué ejercicios ayudan a la dismenorrea?
El ejercicio de baja intensidad, como los estiramientos o el fortalecimiento del tronco, y el ejercicio de alta intensidad, como la zumba o el entrenamiento aeróbico, mejoran la intensidad del dolor menstrual en comparación con la ausencia de ejercicio (diferencia de medias estandarizada [DME] = -1,86; IC del 95%, -2,06 a -1,66; nueve ensayos controlados aleatorios [ECA]; n = 632).
¿Puede la fisioterapia aliviar los dolores menstruales?
Otro estudio descubrió que un programa de fisioterapia que incluía ejercicio aeróbico, fortalecimiento, estiramientos y relajación conducía a una reducción del dolor durante la menstruación.
¿Cuál es el tratamiento más común para la dismenorrea?
Antiinflamatorios no esteroideos. Los AINE son el tratamiento más común para la dismenorrea primaria y secundaria. Disminuyen el dolor menstrual al reducir la presión intrauterina y los niveles de prostaglandina F2α (PGF2α) en el flujo menstrual.
Ejercicio para la dismenorrea
Material y métodos En este estudio experimental se incluirán mujeres diagnosticadas de dismenorrea primaria, que se dividirán aleatoriamente en dos grupos: un grupo de intervención y un grupo control.
El estudio tendrá una duración de dos meses (2 ciclos menstruales). Las pacientes del grupo de intervención recibirán 4 sesiones de tratamiento, 2 veces a la semana antes del primer ciclo menstrual, y 2 veces a la semana durante el segundo ciclo menstrual, La evaluación incluirá el dolor, la calidad de vida, la impresión global de cambio, la satisfacción corporal personal y la autopercepción global y la percepción del dolor.
Introducción La prevalencia de la dismenorrea primaria es elevada y repercute en la calidad de vida, el dolor y la discapacidad. La causa se debe al aumento de postaglandinas que puede verse influido por la disminución de progesterona. En resumen, existe una compleja relación entre las hormonas y el sistema inmunitario.
La terapia manual aumenta la movilidad del sacro y los tejidos de la pelvis, aumentando el riego sanguíneo y el útero que tiene inervación parasimpática a través del sacro mejora la movilidad, motilidad e irrigación.
Dismenorrea secundaria
Dismenorrea es una palabra derivada del griego y significa ciclo menstrual difícil. Puede clasificarse como primaria, lo que conlleva peores índices de calidad de vida de varias mujeres. Este estudio tuvo como objetivo investigar, por medio de revisión bibliográfica, la eficacia y precisión de las terapias existentes para la dismenorrea primaria, específicamente en Fisioterapia.
Se encontraron estudios que describían el uso de termoterapia, crioterapia, estimulación nerviosa eléctrica transcutánea y masaje del tejido conjuntivo, Pilates y acupuntura con mejoría de los síntomas de dichas mujeres. Sin embargo, es evidente la necesidad de estudios sobre maniobras fisioterapéuticas con mayor rigor metodológico.
Los artículos se localizaron utilizando los siguientes términos “dismenorrea”, “fisioterapia”, y sus equivalentes en portugués “dismenorreia” y “fisioterapia”, combinando con los operadores “AND” y “OR”. Los criterios de inclusión fueron: (1) artículos con texto completo; (2) escritos en portugués o en inglés; (3) publicados entre 2005 y 2014; (4) que abordaran la fisioterapia y/u otras terapias complementarias para tratar la dismenorrea. No ha habido restricciones a la muestra para maximizar los resultados del estudio. Se excluyeron del estudio (1) monografías; (2) artículos de revisión; (3) actas de eventos; (4) tesinas y tesis; (5) estudios farmacológicos o que abordaran sólo este aspecto en la dismenorrea; (6) estudios que abordaran la dismenorrea secundaria; (7) estudios fuera del periodo estudiado y (8) estudios en animales.
¿Se puede hacer fisioterapia durante los periodos
La búsqueda produjo 222 citas. De éstas, 11 eran ensayos aleatorios elegibles y se incluyeron en la revisión. El metanálisis reveló reducciones estadísticamente significativas en la gravedad del dolor en una escala de 0 a 10 de la acupuntura (diferencia de medias ponderada 2,3; IC del 95%: 1,6 a 2,9) y la acupresión (diferencia de medias ponderada 1,4; IC del 95%: 0,8 a 1,9), en comparación con un grupo control que no recibió tratamiento. Sin embargo, es probable que se trate de efectos placebo porque cuando los grupos de control en los ensayos de acupuntura/acupresión recibieron un tratamiento simulado en lugar de ningún tratamiento, la intensidad del dolor no difirió significativamente entre los grupos. Se observaron reducciones significativas de la intensidad del dolor en una escala de 0 a 10 en los ensayos individuales de calor (en 1,8; IC del 95%: 0,9 a 2,7), estimulación nerviosa eléctrica transcutánea (2,3; IC del 95%: 0,03 a 4,2) y yoga (3,2; IC del 95%: 2,2 a 4,2). El metanálisis de dos ensayos de manipulación espinal no mostró una reducción significativa del dolor. Ninguno de los estudios incluidos midió la calidad de vida.
Los fisioterapeutas podrían considerar el uso del calor, la estimulación nerviosa eléctrica transcutánea y el yoga en el tratamiento de la dismenorrea primaria. Aunque también se identificaron beneficios para la acupuntura y la acupresión en los ensayos controlados sin tratamiento, la ausencia de efectos significativos en los ensayos controlados simulados sugiere que estos efectos son atribuibles principalmente a los efectos placebo.