Todas estas estructuras juntas sostienen el cuerpo y hacen posible movimientos como correr y saltar. Esa flexibilidad y fuerza también significa que hay muchas oportunidades para que algo salga mal y cause problemas.
Los especialistas en ortopedia de Dignity Health tratan una amplia gama de afecciones de pie y tobillo. Ofrecemos atención para lesiones agudas como caídas o lesiones deportivas, así como problemas más crónicos derivados del cáncer, infecciones y artritis. Busque un médico para obtener más información o programar una consulta.
Los signos y síntomas de las afecciones de pie y tobillo dependen del problema específico. El dolor es un síntoma frecuente. Puede ser repentino (agudo) o duradero (crónico), sordo o agudo, y puede empeorar con la actividad o al llevar calzado. A veces, el dolor puede aparecer incluso con el más mínimo roce. Otros síntomas pueden ser hinchazón, entumecimiento, enrojecimiento, hematomas y cambios en el aspecto de un dedo u otra parte del pie.
¿Cuáles son las causas habituales de las lesiones en los pies?
Causas. Los accidentes de coche y las lesiones deportivas son responsables de muchos problemas traumáticos de pie y tobillo, como fracturas y esguinces. Los resbalones y caídas corrientes también provocan lesiones en pies y tobillos. El desgaste relacionado con la edad de articulaciones, ligamentos, tendones y músculos puede hacerlos propensos a la artritis y las lesiones.
¿Cuáles son los principales problemas de los pies?
Y muchos problemas de los pies, como los dedos en martillo, las ampollas, los juanetes, las durezas y callosidades, los dedos en garra y en maza, las uñas encarnadas, los hongos en las uñas y el pie de atleta, pueden desarrollarse por negligencia, calzado inadecuado y simple desgaste. El dolor de pies puede ser incluso el primer signo de un problema sistémico.
Un esguince de pie es un estiramiento o desgarro de los ligamentos que unen los huesos del pie. Una distensión del pie es un estiramiento o desgarro de los tendones y músculos del pie.
Lesión en la planta del pie
El pie es una de las partes más complejas del cuerpo. Está formado por 26 huesos conectados por muchas articulaciones, músculos, tendones y ligamentos. El pie es susceptible de sufrir muchas tensiones. Los problemas del pie pueden causar dolor, inflamación o lesiones. Estos problemas pueden limitar el movimiento y la movilidad.
El dolor de pies suele deberse a un mal funcionamiento del pie. Un calzado mal ajustado puede empeorar y, en algunos casos, causar problemas en los pies. Unos zapatos que ajusten bien y den un buen soporte pueden evitar la irritación de las articulaciones y la piel del pie. Existen muchos tipos de problemas en los pies que afectan a los talones, los dedos, los nervios, los tendones, los ligamentos y las articulaciones del pie.
Un espolón calcáneo es un crecimiento óseo en el hueso del talón. Suele localizarse en la parte inferior del hueso del talón, donde se une a la fascia plantar, una larga banda de tejido conjuntivo que va desde el talón hasta la parte anterior del pie. Este tejido conjuntivo mantiene unido el arco y actúa como amortiguador durante la actividad. Si la fascia plantar se estira en exceso por correr, llevar un calzado inadecuado o tener sobrepeso, el dolor puede deberse a la tensión y la inflamación del tejido que tira del hueso. Con el tiempo, el cuerpo acumula hueso adicional en respuesta a esta tensión, lo que da lugar a espolones calcáneos. Las opciones de tratamiento pueden incluir:
Los tejidos blandos que se lesionan con más frecuencia son los músculos, los tendones y los ligamentos. Estas lesiones suelen producirse durante actividades deportivas y de ejercicio, pero a veces las simples actividades cotidianas pueden causar una lesión.
Las lesiones agudas de los tejidos blandos varían en tipo y gravedad. Cuando se produce una lesión aguda, el tratamiento inicial con el protocolo RICE suele ser muy eficaz. RICE son las siglas en inglés de reposo, hielo, compresión y elevación.
Un esguince es un estiramiento y/o rotura de un ligamento, una fuerte banda de tejido conjuntivo que conecta el extremo de un hueso con otro. Los ligamentos estabilizan y sostienen las articulaciones del cuerpo. Por ejemplo, los ligamentos de la rodilla conectan el hueso del muslo (fémur) con la tibia, lo que permite caminar.
Las zonas del cuerpo más vulnerables a los esguinces son los tobillos, las rodillas y las muñecas. Un esguince de tobillo puede producirse cuando el pie gira hacia dentro, ejerciendo una tensión extrema en los ligamentos de la parte externa del tobillo. Un esguince de rodilla puede ser el resultado de una torsión repentina, y un esguince de muñeca puede producirse si se cae sobre una mano extendida.
Lista de trastornos del pie
Una caída o un golpe en el tobillo puede romper uno o varios de los tres huesos de la articulación del tobillo: el peroné, la tibia y el astrágalo. Rodar con el tobillo puede provocar la rotura de las protuberancias del extremo de la tibia y el peroné.
El tratamiento de un pie fracturado depende del lugar exacto y de la gravedad de la fractura. Un pie gravemente fracturado puede requerir cirugía para implantar placas, barras o tornillos en el hueso fracturado para mantener la posición adecuada durante la curación.Productos y ServiciosMostrar más productos de Mayo Clinic
Cuándo acudir al médicoAcuda al médico si hay una deformidad evidente, si el dolor y la hinchazón no mejoran con los cuidados personales o si el dolor y la hinchazón empeoran con el tiempo. Además, acuda al médico si la lesión le impide caminar.
