Causas de la fascitis plantar
DiagnósticoLa fascitis plantar se diagnostica basándose en la historia clínica y la exploración física. Durante el examen, el médico buscará zonas sensibles en el pie. La localización del dolor puede ayudar a determinar su causa.
A veces, una radiografía muestra un trozo de hueso que sobresale (espolón) del hueso del talón. En el pasado, a menudo se culpaba a estos espolones óseos del dolor de talón y se extirpaban quirúrgicamente. Pero muchas personas que tienen espolones óseos en el talón no tienen dolor de talón.Más información
TratamientoLa mayoría de las personas que padecen fascitis plantar se recuperan en varios meses con un tratamiento conservador, como aplicar hielo en la zona dolorida, hacer estiramientos y modificar o evitar las actividades que causan dolor.
Fascitis plantar übungen
La fascia plantar es el tejido grueso de la parte inferior del pie. Conecta el hueso del talón con los dedos y forma el arco del pie. Cuando este tejido se hincha o se inflama, se habla de fascitis plantar.Causas
La hinchazón se produce cuando la banda gruesa de tejido de la parte inferior del pie (fascia) se estira o se utiliza en exceso. Esto puede resultar doloroso y dificultar la marcha: La fascitis plantar se observa tanto en hombres como en mujeres. Es una de las afecciones ortopédicas del pie más frecuentes. Se solía pensar que la fascitis plantar estaba causada por un espolón calcáneo. Sin embargo, las investigaciones han demostrado que no es así. En las radiografías se observan espolones calcáneos en personas con y sin fascitis plantar.Síntomas
El síntoma más común es el dolor y la rigidez en la parte inferior del talón. El dolor en el talón puede ser sordo o agudo. La planta del pie también puede doler o arder.El dolor suele ser peor:El dolor puede desarrollarse lentamente con el tiempo o aparecer de repente después de una actividad intensa.Signos y exámenes
Tratamiento de la fascitis plantar
La fascitis plantar es una causa frecuente de dolor de talón en adultos. El dolor suele estar causado por una degeneración del colágeno (que a veces se denomina erróneamente “inflamación crónica”) en el origen de la fascia plantar, en el tubérculo medial del calcáneo. Esta degeneración es similar a la necrosis crónica de la tendinosis, que se caracteriza por la pérdida de continuidad del colágeno, el aumento de la sustancia fundamental (matriz del tejido conjuntivo) y la vascularización, y la presencia de fibroblastos en lugar de las células inflamatorias que suelen observarse en la inflamación aguda de la tendinitis.1 La causa de la degeneración son los microdesgarros repetitivos de la fascia plantar que superan la capacidad del organismo para repararse a sí mismo.
El signo clásico de la fascitis plantar es que el peor dolor se produce con los primeros pasos de la mañana, pero no todos los pacientes presentan este síntoma. Los pacientes suelen notar dolor al inicio de la actividad, que disminuye o desaparece con el calentamiento. El dolor también puede aparecer al permanecer mucho tiempo de pie y a veces va acompañado de rigidez. En los casos más graves, el dolor también empeorará hacia el final del día.
Síntomas de la fascitis plantar
La fascia plantar es un tejido conjuntivo grueso y fibroso que recorre la parte inferior del pie y conecta el hueso del talón (calcáneo) con la bola del pie. Este tejido actúa como amortiguador y sostiene el arco del pie.
La fascitis plantar suele ser una afección crónica que puede desencadenarse por el uso de calzado inadecuado, por correr o, a veces, por ningún motivo claro. Entre los factores que contribuyen a esta afección se encuentran la edad, la anatomía individual del pie, el sobrepeso y los trabajos o actividades de ocio que suponen un esfuerzo repetitivo para el pie de la persona.
El principal síntoma de la fascitis plantar es un dolor intenso en la zona del talón que suele empeorar por la mañana y mejora a lo largo del día. El dolor suele concentrarse en la zona donde el ligamento se une a la base del talón.
La fascitis plantar se confunde a veces con un espolón calcáneo, que es un espolón óseo en la parte inferior del calcáneo (hueso del talón). Aunque ambas afecciones pueden estar presentes y relacionadas, también pueden aparecer de forma independiente. En otras palabras, una persona puede tener fascitis plantar a pesar de no tener espolón calcáneo, mientras que otra puede tener espolón calcáneo pero no tener inflamación de la fascia ni dolor en el talón.