Anillo inguinal profundo
Canal inguinalAnte del abdomen, mostrando las marcas superficiales de las arterias y el canal inguinal. (El escroto. En el lado izquierdo se ha abierto la cavidad de la túnica vaginal; en el lado derecho sólo se han extirpado las capas superficiales al Cremaster. (Canal inguinal derecho visible arriba a la izquierda.)DetallesIdentificadoresLatincanalis inguinalisMeSHD007264TA98A04.5.01.026TA22381FMA19928Terminología anatómica[editar en Wikidata].
Los canales inguinales son los dos conductos de la pared abdominal anterior de humanos y animales que en los machos transportan los cordones espermáticos y en las hembras el ligamento redondo del útero. Los canales inguinales son más grandes y prominentes en los machos. Hay un canal inguinal a cada lado de la línea media.
Los canales inguinales están situados justo por encima de la mitad medial del ligamento inguinal. En ambos sexos, los canales transmiten los nervios ilioinguinales. Los canales tienen una longitud aproximada de 3,75 a 4 cm.[cita requerida], angulados anteroinferior y medialmente. En los machos, su diámetro es normalmente de 2 cm (±1 cm de desviación estándar) en el anillo inguinal profundo[1][notas 1].
¿Cuál es la diferencia entre canal inguinal y anillo inguinal?
Anillo inguinal superficial
Es una abertura triangular que forma la salida del canal inguinal, que alberga el nervio ilioinguinal, la rama genital del nervio genitofemoral y el cordón espermático (en los hombres) o el ligamento redondo (en las mujeres). En el otro extremo del canal, el anillo inguinal profundo forma la entrada.
¿Qué conducto atraviesa el canal inguinal?
El conducto deferente entra en la cavidad abdominopélvica a través del canal inguinal y pasa a lo largo de la pared pélvica lateral.
¿Cuál es el otro nombre del canal inguinal?
Panorama general. La región inguinal del cuerpo, también conocida como ingle, está situada en la porción inferior de la pared abdominal anterior, con el muslo inferiormente, el tubérculo púbico medialmente y la espina ilíaca anterosuperior (ASIS) superolateralmente.
Canal inguinal femenino
Había una tumefacción no reducible, tensa y sensible que medía aproximadamente 10 × 8 cm en la región inguinal izquierda. El impulso de la tos estaba ausente. Otras exploraciones e investigaciones rutinarias eran normales. La exploración del canal inguinal reveló una hernia inguinal indirecta que contenía epiplón, la esquina izquierda del útero y una trompa de Falopio izquierda. La extensión de la incisión reveló un útero bien formado, el cuello uterino y la parte superior de la vagina unidos a la próstata por una banda fibrosa gruesa con un testículo derecho atrófico incrustado en el ligamento ancho (Figuras 2 y 3).Figura 2
Se realizó una escisión total del útero con las trompas de Falopio bilaterales y el testículo derecho, y la operación se completó con una herniorrafia inguinal izquierda. Aunque el testículo izquierdo estaba atrófico, se tomó una biopsia y se dejó para mantener la secreción hormonal. Nuestro paciente se recuperó bien en el postoperatorio. Para evitar el riesgo de malignidad en el testículo, se planificó un seguimiento a largo plazo.Grosso modo, las muestras extirpadas se identificaron como un útero con revestimientos endometrial y endocervical patentes y dos trompas de Falopio sin ovarios. El testículo derecho medía 1 × 1 × 1 cm, era atrófico y estaba incrustado en el ligamento ancho derecho. La muestra de biopsia del testículo izquierdo medía 0,5 × 0,5 × 0,5 cm.En el examen histopatológico se observó tejido muscular uterino con su cavidad revestida por tejido endometrial atrofiado (Figura 4). Las secciones de ambas trompas de Falopio mostraban congestión y fibrosis. No se observó tejido ovárico. Los cortes de ambos testículos mostraban túbulos seminíferos atróficos con hialinización, células de Sertoli (Figuras 5 y 6) y evidencia de hiperplasia de células de Leydig (Figura 7). No se observaron indicios de malignidad en las muestras de tejido de ninguno de los testículos.Figura 4
Anatomía de la hernia inguinal
El canal inguinal es un conducto de unos 4 a 5 cm de longitud que atraviesa la pared abdominal de arriba abajo en la región inguinal. En su interior se encuentran nervios y vasos linfáticos, así como, en el varón, el cordón espermático con el conducto seminal y, en la mujer, el ligamento redondo (uno de los ligamentos que sirven para fijar el útero dentro de la pelvis). Desde el punto de vista anatómico, la región inguinal es un punto débil de la pared abdominal, ya que en algunas partes la capa músculo-tendinosa es muy fina. [Fig. 2]
Canal inguinal Kenhub
Canal inguinalFrente del abdomen, mostrando las marcas superficiales de las arterias y el canal inguinal. (El conducto inguinal es un tubo en la parte inferior izquierda.)El escroto. En el lado izquierdo se ha abierto la cavidad de la túnica vaginal; en el lado derecho sólo se han extirpado las capas superficiales al Cremaster. (Canal inguinal derecho visible arriba a la izquierda.)DetallesIdentificadoresLatincanalis inguinalisMeSHD007264TA98A04.5.01.026TA22381FMA19928Terminología anatómica[editar en Wikidata].
Los canales inguinales son los dos conductos de la pared abdominal anterior de humanos y animales que en los machos transportan los cordones espermáticos y en las hembras el ligamento redondo del útero. Los canales inguinales son más grandes y prominentes en los machos. Hay un canal inguinal a cada lado de la línea media.
Los canales inguinales están situados justo por encima de la mitad medial del ligamento inguinal. En ambos sexos, los canales transmiten los nervios ilioinguinales. Los canales tienen una longitud aproximada de 3,75 a 4 cm.[cita requerida], angulados anteroinferior y medialmente. En los machos, su diámetro es normalmente de 2 cm (±1 cm de desviación estándar) en el anillo inguinal profundo[1][notas 1].