Reconstrucción y rehabilitación de Pcl
La rodilla es la articulación más grande del cuerpo humano. Al desempeñar un papel importante en nuestra capacidad de movimiento y ayudar a soportar el peso de nuestro cuerpo, un problema en la rodilla puede tener un impacto significativo en nuestras vidas.
La rodilla se refuerza y sostiene gracias a una serie de ligamentos, bandas de tejido conjuntivo resistente que conectan los huesos entre sí. Como su nombre indica, el ligamento cruzado posterior (LCP) está situado en la parte posterior de la rodilla. Conecta el fémur (hueso del muslo) con la parte posterior de la tibia (el mayor de los dos huesos de la parte inferior de la pierna, a veces denominado espinilla). El LCP proporciona estabilidad a la articulación limitando el movimiento de la tibia hacia atrás.
El LCP no se lesiona tan fácilmente como los demás ligamentos de la articulación de la rodilla. La mayoría de las veces se lesiona por un impacto importante en la rodilla o por un tirón debido a una torsión accidental excesiva de la rodilla.
Muchas lesiones del LCP son leves y se curan de forma natural con el tiempo. Sin embargo, algunas lesiones son más graves y pueden requerir cirugía para reparar el daño. A menudo, cuando se daña el LCP, también se producen otras lesiones en la rodilla. Por ejemplo, un golpe directo y fuerte en la rodilla mientras se practica un deporte de contacto puede acabar desgarrando múltiples ligamentos y dislocar la propia articulación de la rodilla. En el caso de lesiones múltiples de este tipo, es casi seguro que sea necesaria una intervención quirúrgica para restablecer la estabilidad y la función adecuadas de la rodilla.
¿Es dolorosa la cirugía del LCP?
A continuación le explicamos qué puede esperar y cómo afrontar los primeros días tras una operación de reconstrucción del LCP: Es probable que sienta dolor o molestias durante los primeros días. Tome los analgésicos que le indique su médico. Pueden ser analgésicos de venta libre, como aspirina o ibuprofeno, o fármacos narcóticos más potentes.
¿Cómo se realiza la cirugía del LCP?
La mayoría de las reconstrucciones del LCP se realizan mediante artroscopia de rodilla. En este procedimiento mínimamente invasivo, el cirujano realiza varias incisiones pequeñas alrededor de la articulación de la rodilla e introduce un estrecho catéter de fibra óptica (denominado artroscopio) para examinar el estado de la rodilla.
¿Cuál es la gravedad de una operación de LCP?
Debido a que gran parte de la cirugía para una reconstrucción del LCP se realiza en la parte posterior de la rodilla, existe un mayor riesgo de lesión de un nervio o vaso sanguíneo que en la mayoría de las cirugías de rodilla. Es importante que un atleta se comprueba tanto durante como después de la cirugía que el daño a una de estas estructuras importantes no se produjo.
Ortobulillas de reconstrucción Pcl
El ligamento cruzado posterior (LCP), uno de los cuatro ligamentos principales de la rodilla, está situado en la parte posterior de la rodilla. Conecta el fémur con la tibia. El LCP limita el movimiento hacia atrás de la tibia.
Las lesiones del LCP son muy poco frecuentes y más difíciles de detectar que otras lesiones de ligamentos de la rodilla. Las lesiones de cartílago, las contusiones óseas y las lesiones de ligamentos suelen producirse en combinación con lesiones del LCP. Las lesiones del LCP pueden clasificarse como I, II o III en función de la gravedad de la lesión. En el grado I el ligamento está ligeramente dañado y ligeramente estirado, pero la articulación de la rodilla está estable. En el grado II hay rotura parcial del ligamento. En el grado III se produce una rotura completa del ligamento, que se divide en dos mitades y hace que la articulación de la rodilla sea inestable.
El LCP suele lesionarse por un impacto directo, como en un accidente de automóvil, cuando la rodilla flexionada golpea con fuerza el salpicadero. En el deporte, puede producirse cuando un deportista cae al suelo con la rodilla doblada. Una lesión por torsión o una extensión excesiva de la rodilla pueden provocar la rotura del LCP.
¿Merece la pena una operación de pcl?
La rodilla es estructuralmente compleja. Se mantiene unida por cuatro ligamentos (ACL, PCL, MCL, LCL) y dos tendones (cuádriceps y rotuliano). Dos cartílagos amortiguadores llamados meniscos, situados entre el fémur y la tibia, ayudan a amortiguar y estabilizar la articulación. Está compuesta por tres huesos. El hueso del muslo (fémur), asentado sobre el hueso más grande de la pierna (tibia). La rótula se desliza en un surco situado en el extremo del fémur.
El LCP es una banda de tejido resistente que conecta hueso con hueso. Es similar al ligamento cruzado anterior (LCA), ya que cruza el interior de la articulación de la rodilla para conectar el fémur con la tibia. Los ligamentos permiten que la rodilla tenga la flexibilidad necesaria para moverse en varias direcciones manteniendo la estabilidad. El LCA y el LCP ayudan a mantener alineada la articulación. El LCA y el LCP contrarrestan las fuerzas excesivas hacia delante y hacia atrás e impiden el desplazamiento de los huesos. El LCA y el LCP controlan la rotación de la tibia. Usted rota la tibia cuando gira la pierna hacia fuera para empujar el suelo con el pie. Por ejemplo, este movimiento se utiliza para empujar de lado para patinar, correr o mover el cuerpo para sentarse en el asiento de un coche.
Tasa de éxito de la cirugía Pcl
Tabla 2 Características clínicas y relacionadas con el tratamiento de las lesiones del LCPaTabla de tamaño completoAl comparar aquellos con lesiones aisladas del LCP y aquellos con lesiones combinadas del LCP, descubrimos que aquellos con lesiones aisladas del LCP tenían seguimientos más prolongados (p = 0,032), mayor CKRS antes de la cirugía (p = 0,006) y menor PDT preoperatoria (p = 0,042) (Tabla 3).
Todos los datos personales de los pacientes se mantienen en secreto durante todo el estudio y no se divulga ningún dato de los pacientes. Todos los pacientes dieron su consentimiento informado por escrito para participar en el estudio. El protocolo del estudio ha sido aprobado por la Junta de Revisión Institucional de la Universidad de Ciencias Médicas de Fasa (código ético #IR.FUMS.REC.1396.272).
BMC Musculoskelet Disord 21, 526 (2020). https://doi.org/10.1186/s12891-020-03533-6Download citationCompartir este artículoCualquier persona con la que compartas el siguiente enlace podrá leer este contenido:Get shareable linkLo sentimos, actualmente no hay disponible un enlace compartible para este artículo.Copy to clipboard